Solo para viajeros sibaritas: Los 10 países del mundo donde mejor se come
✍️ Gracia Martin ⎮ Living la vida Georgia
En general, la gente viaja para ampliar sus horizontes, ver más del país y conocer gente nueva, pero para uno de cada cinco viajeros, lo importante es la comida del destino.
Cada vez más los viajeros son más propensos a reservar un viaje basándose en la oferta culinaria. No son las mágicas aguas turquesas de Koh Phi Phi, el ultra visitado sitio histórico de Machu Picchu, las pintorescas coloridas casas de Nyhavn o la rica colección del Met lo que les ha decidido a volar a Bangkok, Lima, Copenhague o Nueva York.
Ya sea rica, sana, emblemática o desconocida, la gastronomía mundial suele ser sinónimo de sorpresa y cambio de aires. Sin embargo, hay tantas posibilidades y sabores por descubrir que no siempre sabemos dónde poner el tenedor.
Algunos afirman que es la comida china, otros pregonan la superioridad de la mexicana o la tailandesa, hay muchos sabores, gustos y tradiciones entre los que elegir. Incluso dentro de la cocina nacional de un país, a veces existe una increíble diversidad entre regiones, lo que hace imposible generalizar. Por eso, sabiendo que no voy a contentar a nadie, he recopilado los 10 destinos gastronómicos que más me han impactado. Destinos especiales, sólo para los viajeros más sibaritas.
La buena comida merece un viaje. De la cocina española no hablo. El cochinillo de Segovia o cómo se come en Galicia, es otra historia. Cómo se mezclan los alimentos en la gastronomía irani me fascina. La deliciosa y desconocida comida georgiana creo que está infravalorada. Pero si me preguntan, aquí están los 10 mejores viajes gastronómicos, según mi modesta opinión:
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Los 10 países del mundo donde mejor se come
10. Marruecos
¡Siempre se vuelve con unos kilos de más cuando se viaja al país de las mil y una noches! No es de extrañar conociendo lo generosa que es la cocina marroquí. En la cocina, los marroquíes nunca escatiman azúcar, aceitunas, miel y aceite de oliva. También tienen el arte y la manera de combinar sabores dulces y salados en sus especialidades, para nuestro gran deleite.
Siempre en buena compañía, he disfrutado de un buen cuscús bajo una tienda en el desierto en las dunas de Merzouga pero también de otro delicioso en un Riad de la Medina de Fez. El decorado cuenta tanto como el contenido del plato, en Marruecos se disfruta tanto de la vista como del estómago. Al final de la comida, solo hay que terminar con un té de menta para cambiar totalmente de aires y olvidar todo. Marruecos alimenta cuerpo y alma. Garantizado.
9. Perú
Mi visita a Perú fue motivada por mi amor a las montañas. El inca trail y un descubrimiento de una cultura ancestral me dejaron sin habla. Los cuyes o conejos de indias ensartados en palos y saboreados como una delicatessen me dejaron absorta.
La comida peruana se reveló exquisita. Mucha gente no lo sabe, pero el ceviche es una creación peruana, nacida de la mezcla de las cocinas tradicional japonesa y local. La llegada masiva de la población japonesa a Perú marcó un punto de inflexión en su acercamiento al marisco en el plato peruano. Al mismo tiempo, las técnicas culinarias locales no dejarán de deleitarte. Prueba frituras de mil maneras, carnes y despojos y, por supuesto, bebidas increíbles. Dato curioso: Perú es el único país del mundo donde Coca-Cola no es el refresco número uno. Perú es diferente en todos los sentidos. Una apuesta ganadora.
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8. China
Una mesa redonda con 21 platos típicos de la región de Xian en una bandeja rotatoria hicieron nuestras delicias. Recuerdo cómo nos peleamos girando la mesa para comer las patatas cubiertas con una especie de caramelo transparente. Recuerdo las risas y la incapacidad de dilucidar qué se escondía detrás de muchos platos cocinados con sabiduría ancestral.
Una de las tradiciones culinarias más antiguas del mundo es también una de las más variadas. El mundo despertó a la comida china hace mucho tiempo y su popularidad sigue creciendo año tras año, y es al pueblo chino al que debemos el suculento pato pequinés y tantas otras especialidades míticas de la cocina asiática. Lejos de los bufés y de los restaurantes de medio pelo que todos conocemos, en China descubrirás una cocina refinada. Siempre hay algo reconfortante en la cocina tradicional china. Los platos están calientes y generosamente adornados. El equilibrio de sabores se domina a la perfección y los platos se degustan en un ambiente acogedor. China es uno de esos países que ha mantenido vivas sus recetas ancestrales a lo largo de los años.
7. México
Durante mi viaje en México me sorprendió la cantidad de carne y las enormes porciones que encontraba en cada restaurante. El guacamole y los ceviches del Yucatán conquistaron mi corazón.Un amigo en Playa del Carmen me llevo a beber cacao picante y luego fuimos a comer unas carnitas en su puesto ambulante preferido y si, lo debo admitir los mexicanos son los reyes de la comida callejera, ¡las propuestas culinarias son infinitas! Sobre una base de pan o pequeñas tortitas crujientes, puedes disfrutar de las ricas e intensas salsas por las que México es famoso. Todo ello generosamente cubierto de queso y acompañado de carne, con sabores picantes.
La comida es asequible y deliciosa. Los visitantes pueden degustar gorditas, tacos al pastor, enchiladas suizas y otros muchos platos tradicionales. Ciudad de México también es un gran destino para la comida vegana. En barrios como Condesa y Roma se pueden encontrar alternativas veganas a los platos tradicionales que se sirven en la capital mexicana. Sólo los tontos piensan que el guacamole y las fajitas son las únicas cosas que se pueden encontrar en México. Atrévete a comerte México y luego me cuentas.
6. India
He visitado la India dos veces. Mientras comía, me di cuenta de que la cocina india da mucha importancia a los platos vegetarianos, sobre todo en el Rajasthan donde la mayoría de la población no come carne. Las invitaciones a comer en los infinitos trenes y el simple pero delicioso Paneer Tikka Massala vienen a mi mente si decido pensar en lo que comí en este país.
Todo el país está repleto de mercados de comida y restaurantes que ofrecen platos auténticos diversos y ricamente condimentados. Las tradiciones ancestrales y el vasto territorio del subcontinente crean una cocina que toca todas las notas en la escala culinaria y siempre está llena de sorpresas. Para un viaje picante, la India es el lugar indicado.Una de las principales promesas de la India es llevar los sabores al límite, sin adormecer el paladar aunque a veces,lamentablemente, lo consiguen. Es un destino de ensueño para los amantes de la buena mesa que desean llevar sus papilas gustativas a la aventura. Estás avisado.
5. Tailandia
Llegué a Ayutthaya a horas intempestivas después de un largo viaje en tren. En la guesthouse me dijeron que el restaurante estaba cerrado. Ante mi cara de pena me propusieron cenar con ellos.Nunca olvidaré el exquisito festín de ensalada de papaya, curry massaman y un delicioso cerdo cocido a fuego lento.
La cocina tailandesa, con sus innumerables sabores y especias, no es para todo el mundo. Pero hay suficientes variaciones regionales como para ofrecer una amplia variedad de platos, y la cultura culinaria hace que haya chefs bien formados en todo el mundo sirviendo variaciones de platos típicos del país desde restaurantes de alto nivel hasta locales de comida para llevar. Si buscas un destino culinario sabroso, Tailandia debe estar en tu radar. En Bangkok, encontrarás sabores salados, dulces, agrios y un largo etcétera. Y una de las mejores cosas de comer fuera en Bangkok es que se puede conseguir una buena comida de un vendedor callejero con la misma facilidad que en un restaurante de lujo.
4. Líbano
Llevábamos prisa porque teníamos que coger un tren para volver a Tel Aviv. Decidimos saciar nuestro apetito en un puesto callejero. Un enfadado vendedor freia falafel con cierta parsimonia. Cuando llegó nuestro turno, su enfado se acrecentó ya que no entendíamos lo que nos proponía. En un intento de no enfadar más al cocinero dejamos que él decidiese cómo acompañar las crujientes bolas hechas con garbanzos. Un limón confitado, que nunca hubiese yo pedido, hizo de este falafel la delicia que fue. Toda una experiencia culinaria en una callejuela de Akra, a recomendar.
Fattoush, falafel, halva, hummus, baklava, kibbeh, labneh, shawarma, tahini, za’atar… hay tanto que disfrutar en la cocina libanesa de oriente próximo. Los libaneses emigran a todas partes y llevan consigo su rica tradición culinaria, lo que significa que muchas otras culturas han llegado a apreciar su cocina. Debido a que el Líbano ha sido el hogar de tantas culturas diferentes a lo largo de su historia, representa una amplia gama de influencias alimentarias. En diferentes épocas, franceses, sirios y otomanos han gobernado Beirut, y cada uno de ellos ha dejado su huella en las tradiciones culinarias de la región. A ti de descubrirlas.
3. Francia
La boulangerie l’Opera en la plaza homónima en el centro de Lyon ofrece las mejores baguettes del mundo. He vivido en Francia y creo que la verdadera estrella de la cocina francesa es, sin duda, el pan o la baguette. Un bocadillo con jamón de York y mantequilla es una auténtica delicia que apenas puede competir con casi nada, para ganar el primer premio en sabor y sencillez.
Aunque nos pese, la cocina francesa ha dominado el mundo.Tradición culinaria que ha definido la gastronomía moderna, la influencia de la cocina francesa se deja sentir en todo el mundo. Otras cocinas tienden a quedarse en el camino, pero la cocina francesa es una buena cocina y siempre lo será. Puede que Lyon sea la capital culinaria del mundo, conocida por sus ricos platos y refinados sabores. Francia es famosa por sus cruasanes y pasteles, macarrones, steak tartare, sopa de cebolla y, por supuesto, el queso. Un must para los foodies.
2. Japón
Cuando no existían los vuelos low cost y volar en Japan Airlines era un auténtico placer, y ante el ofrecimiento de la azafata de elegir entre comida europea o japonesa, decidi erróneamente decantarme por la comida del país del sol naciente, pensando que cenaría en el avión un delicioso tempura o sushi. Descubrí con estupor que un alga negra insípida y una piel de pollo asomando en un chankonabe, arruinaban mis expectativas de cenar bien en el avión. Pensé que aquel viaje era un error y que la comida de Japón me iba a jugar una mala pasada
En contra de lo que aquella noche sentí, descubrí unos sabores que ni siquiera imaginaba. Gracias a Japón por las emocionantes veladas de comida callejera, en busca del mejor ramen de Tokio. La cocina ritualista, impregnada de cultura y tradición japonesas, convierte cada comida en una experiencia increíble. Japón también ha sido un maestro en el arte de sublimar los productos cotidianos (huevos, fideos, caldo, verduras frescas, aves, etc.) y la cocina sana durante generaciones. Si te gustan los retos, Japón es un adversario de altura que no defrauda.
1. Italia
Ninguna lista de viajes gastronómicos estaría completa sin una opción italiana. En la capital italiana deguste una pizza al taglio di melanzana que todavía recuerdo. Sicilia y su pasta con sardinas. La polenta en Venecia. Creo que cada ciudad se queda pegada a esos aromas y esos sabores donde se ha degustado carbonara, alcachofas, pizzas, bocadillos de porchetta y un sinfín de pastas y ricos vinos. Para terminar, se disfruta de un espresso y un helado en el país que le dio fama mundial.
Es difícil discutir el primer puesto, ocupado por Italia. La comida italiana es la más popular de todas las cocinas y crece año tras año. Indudablemente deliciosa, parte de la razón por la que la comida italiana viaja tan bien y atrae a tanta gente son sus sabores suaves basados en ingredientes de temporada de buena calidad. Belleza, equilibrio, sencillez y emoción, la comida italiana lo tiene todo. Solo hay que dejarse llevar.
Dime cual es tu país favorito para un viaje gastronómico en los comentarios. Te leo.
Un comentario
Cris
ESPAÑA ES EL MEJOR LUGAR CON DIFERENCIA